lunes, 26 de septiembre de 2016

CAMPEONATO DEL MUNDO MASTER MARATON. BRANDEMBURGO 2016

Domingo día 11 de septiembre, aeropuerto de Madrid. Me encuentro con mi compañero Julio y con Vicente Tortajada para poner rumbo a Berlín donde nos esperan Blanca Arroyo y Luis Medrano que han llegado en un vuelo anterior. Como de costumbre  buen ánimo y muchas ganas de que comience el campeonato; no se lo que nos vamos a encontrar en el campo de regatas pero al menos, en mi caso, puedo asegurar que me siento bien y acudo a competir en el mejor estado de forma. En el aeropuerto de Berlín nos espera un transporte que hemos contratado hace días y que nos va a desplazar a Brandemburgo, no es de la organización porque no tenemos  muy buenas experiencias al respecto en otros campeonatos internacionales así que nos acomodamos en la flamante furgoneta y nos disponemos a viajar a nuestro destino contando las "batallitas" de rigor y pormenores de la competición. Tampoco hemos hecho la reserva de los hoteles con la organización, Blanca consiguió hace meses  unos magníficos apartamentos a un excelente precio así que después de dejar las maletas nos dedicamos a conocer la ciudad y, como no, degustar la famosa cerveza alemana. . . . . .bueno. . . .la mía sin alcohol.

Lunes dia 12, despues de hora y media intentando buscar un medio de transporte que nos lleve al campo de regatas por fin damos con el autobús que nos va a dejar a unos 10-15 minutos andando del circuito. Hace un dia soleado y una temperatura de 30 grados, algo inusual en estas latitudes para el mes de septiembre. El lugar donde se va a celebrar el campeonato es perfecto, había visto fotos del recinto pero reconozco que "in
situ" el entorno es muy agradable y si a eso se le añade una muy buena y completa infraestructura con toda clase de servicios el resultado es para estar contentos. Es hora de acreditarse y nos dirigimos a las oficinas para formalizar nuestra inscripción, ya tendremos tiempo mas tarde para preparar las embarcaciones y entrenar en el circuito. Nos sorprende lo leeeeeeentos que son nuestros amigos alemanes a la hora de gestionar estos trámites (tampoco les daría yo el óscar a la simpatía), siempre ocurre lo mismo, llevo muchos años compitiendo en pruebas internacionales y salvo excepciones los organizadores siempre se complican la vida para tramitar una simple inscripción. Al final conseguimos nuestra acreditación que nos va a acompañar todos los días colgada de nuestro cuello y a eso de las 11.30 h nos vamos a preparar las embarcaciones para llevar a cabo un entrenamiento en el circuito.

Saludo a compañeros de otros países y comento con ellos aspectos de la prueba. . . . .que si el porteo, que si el viento, que si esto, que si aquello, etc, vamos, lo de siempre. Tenemos ganas de ir al agua así que sin demora nos plantamos en la orilla para dar una vuelta al circuito y ensayar el porteo; por cierto, un porteo enmoquetado con un material que a todos nos deja sorprendidos por lo agradable que es al pisar sobre el. El campo de regatas se ha preparado en una pista donde se celebran pruebas de velocidad, no hay orillas, ni corrientes, ni ramas, ni curvas, ni piedras. . . . . .no hay nada de nada, una recta para ir y otra para volver y punto, algo de viento y alguna que otra lancha a motor que toca las narices pero no es demasiado problema.
Las ciabogas amplias y sin complicaciones y el porteo cómodo para desembarcar y embarcar pero mucho mas largo de lo que creíamos, ahí se van a ganar y perder muchos segundos. Después de comer en el restaurante griego del recinto con unas espectaculares vistas al lago seguimos con parte de las acreditaciones (señor, que cruz, con lo fácil que seria crear un buen
programa informático) y una vez finalizada las tareas vuelta a Brandemburgo para hacer algo de turismo y prepararnos para la cena.
Martes día 13. . . .(caray, 13 y martes!!!), madrugón para estar temprano en el circuito; los K-1 y C-1 Masters comienzan muy temprano y a las 8.30 h. ya estamos preparando el material para la competición. Como yo no compito en K-1 me dedico a ayudar a los compañeros y a desearles toda la suerte del mundo.
El campo de regatas dispone de unas comodísimas gradas desde donde se puede contemplar toda la prueba (esta vez si que me he traído los prismáticos) y ahí me sitúo para ver los lances de las regatas y de vez en cuando entregar el avituallamiento. Caen las primeras medallas para el equipo español y a eso de las 12.30 h. tengo tal "mono" de piragua que cojo un K-1 del stand de Roman y me voy a dar paladas como loco por el lago. . . . . no aguantaba mas. . . . . Después de comer en el hangar que la organización ha preparado para los piragüistas volvemos de nuevo a las gradas para deleitarnos con la magnifica ceremonia de entrega de medallas; mañana es el turno de los K-2 y no hago otra cosa que pensar si yo estaré en ese pódium. . . . . .ya veremos.

Miércoles 14, he dormido de un tirón y tengo todo listo para comenzar la competición. Hoy es el turno de los K-2 y C-2 y al igual que ayer también hemos llegado temprano al campo de regatas. Por cierto, a eso de las 8.30 h. me he encontrado con la agradable sorpresa de la visita inesperada de unos amigos que han venido de
España para verme. . . . ahora solo falta que volquemos de nuevo (vaya racha llevamos) y se lleve una desilusión.
Lo importante es que nos encontramos bien, motivados y con ganas de ponernos en línea de salida; sabemos que hay
embarcaciones muy competitivas y
las medallas van a estar caras pero como ya he dicho al principio me encuentro fuerte y Julio no se siente cansado de la paliza que se dio ayer así que después de dar los últimos toques al material nos vamos al agua para iniciar el calentamiento y aislarnos del jaleo de la orilla.
Hace algo de viento pero no es muy molesto y la temperatura es perfecta. El sistema de salida es con un "cepo-red" como se llevo a cabo en Pontevedra y ahí que nos colocamos para esperar las ordenes del arbitro e iniciar la competición. "Ready Go!!!!" comienza la prueba situándonos en primera posición con el otro barco español de Vázquez y Villalobos a la derecha y una embarcación sudafricana a la izquierda. . . . .comenzamos bien. Al paso por el 500 quedamos 4 k-2 en cabeza dos sudafricanos y dos españoles (lo clavé en las predicciones),  a buen ritmo y situados cómodamente en la "V" nos dirigimos a la primera ciaboga.
Tirones por aquí, tirones por allá, Julio y yo a lo nuestro, concentrados, ahorrando energía y controlando las posiciones, muy diferente de los dos barcos sudafricanos con una táctica de competición muy visceral y alocada cometiendo a veces errores de bulto. Después de dos vueltas al circuito llega el primer porteo y se adelanta el barco de Vázquez-Villalobos que cobran una ventaja al embarcar;  los sudafricanos aceleran intentando dar alcance al K-2 español pero no lo consiguen, se sorprenden de que nosotros no tiremos pero teníamos claro desde hace días que el oro ya estaba decidido, y no estamos por la labor de desgastarnos para luego quedarnos en puertas del pódium así que ahora quedamos tres embarcaciones para dos medallas. . . . . . .comienza la fiesta!!!

Las vueltas se suceden con los clásicos tirones antes de las ciabogas y porteos, jamás he corrido tanto y tan al limite, no hay descanso, los barcos sudafricanos siguen con su concepto de ir a muerte y Julio que tiene la mente muy fría a la hora de competir coloca tácticamente nuestro K-2 siempre en la mejor posición. Nos hemos dado cuenta que cuando se produce un sprint siempre somos nosotros los que conseguimos adelantarnos, eso esta bien. Ultimo porteo, las pulsaciones por las nubes, salimos segundos en el embarque (como corren estos tíos!!!) pero después de la ciaboga que esta situada a apenas 100 m. cogemos la cabeza, "Julio, estos ya no pasan" le comento a mi compañero y con buen ritmo controlando a izquierda y derecha afrontamos los últimos metros para entrar en meta delante de ellos en segunda posición consiguiendo un subcampeonato del mundo. Una medalla que a mi personalmente, por una serie de cuestiones personales, me supone una inmensa alegría. . . . . . . . .la vida esta llena de sorpresas. . . . . hemos hecho una magnifica competición y he compartido unos días con gente maravillosa, ahora a disfrutar de unas mini vacaciones en Berlín. Sin duda éste va a ser un campeonato para recordar.